lunes, 1 de junio de 2015

ROGER POL-DROIT: QUÉ HARÍA SI ME QUEDARAN 3.600 SEGUNDOS DE VIDA

En los periódicos de más tirada de nuestro país podéis encontrar entrevistas al filósofo francés Roger Pol-Droit, un señor que hace gala de la filosofía como un elemento de la vida cotidiana y que visitó Madrid en el mes de febrero. En uno de sus más recientes libros, Si me quedara una hora de vida, se plantea a sí mismo y a sus lectores esta situación límite y qué decidiría  hacer con esa hora antes de "pasar al otro barrio".

Esta pregunta tiene que ver con los valores propios de la jerarquía de cada uno, y no es una pregunta solo existencial, sino plenamente moral.

También tiene que ver con la autoconciencia de nuestra finitud que caracteriza al ser humano a diferencia del resto de animales.

Tomo prestada su idea para preguntaros a vosotros: ¿qué haríais con una hora de vida? Imaginaos un holocausto nuclear anunciado, un ataque organizado de zombis, una epidemia de ébola mundial (uffff...).

Para que se interprete bien este ejercicio, hago constar que se trata de plantearse, en realidad, los valores de cada uno, y como los materializaría en una decisión activa. Por ejemplo, hay quien tomaría esa hora para estar con sus seres más queridos, otros aprovecharían para pedir perdón por asuntos del pasado, otros rezarían a su dios, otros pondrían un mensaje en una caja que enterrarían bajo tierra, otros releerían sus poemas favoritos....

Este es un fragmento de la entrevista que  hicieron a Pol-Droit en El País:

"P. En Si solo me quedara una hora de vida elige usted el momento final para hablar sobre lo que es importante en la vida.
R. He escogido esta aproximación para intentar llegar a un momento de verdad. Imaginemos que nos quedan 3.600 segundos por delante. Es una ficción que nos pone frente a lo que no queremos ver: el carácter finito de nuestra existencia. Si nos queda una hora, ¿qué decidimos hacer de esencial? Uso este dispositivo para exponer lo que me parece más importante de lo que he comprendido de la vida.
P. ¿Y qué ha comprendido de la vida?
R. Lo primero, que hay que escogerla. No la podemos ver desde fuera, estamos inmersos en ella. No sabemos exactamente de qué se trata, pero lo que podemos decir es lo que nos enseñan nuestras sensaciones. ¿Qué me ha enseñado la vida? La duda, la ignorancia y la confianza en las sensaciones físicas."
(http://cultura.elpais.com/cultura/2015/02/13/actualidad/1423830518_127946.html)



martes, 28 de abril de 2015

RAFAEL ARGULLOL: MIRAR SIN VER

Ahora que vamos a reflexionar sobre la cultura y el hombre, sería interesante que os pararáis a pensar en las palabras de este texto de Rafael Argullol, filósofo español, que se incluye en el artículo "Vida sin cultura", publicado en El País el pasado 6 de marzo de 2015 (http://elpais.com/elpais/2015/03/02/opinion/1425310111_943827.html):

...el hombre actual, reacio al valor de la palabra, confía su conocimiento al poder de la imagen. Esto es indudable, pero, ¿cuál es la calidad de su mirada? ¿Mira auténticamente? A este respecto, puede hacerse un experimento interesante en los museos a los que se accede con móviles y cámaras fotográficas, que son casi todos por la presión del denominado turismo cultural.
Les propongo tres ejemplos de obras maestras sometidas al asedio de dicho turismo: La Gioconda en el Museo del Louvre, El nacimiento de Venus en los Uffizi y La Pietà en la Basílica de San Pedro. No intenten acercarse a las obras con detenimiento porque eso es imposible; apóstense, más bien, a un lado y miren a los que tendrían que mirar. La conclusión es fácil: en su mayoría no miran porque únicamente tienen tiempo de observar, unos segundos, a través de su cámara: de posar para hacerse un selfie. Capturadas las imágenes, los ajetreados cazadores vuelven en tropel a la comitiva que desfila por las galerías. ¿Alguien tiene tiempo de pensar en la ambigua ironía de Leonardo, o en la sensualidad de Botticelli, o en el sereno dramatismo de Miguel Ángel? Es más: ¿alguien piensa que tiene que pensar en tales cosas?
Paradójicamente, nuestra célebre cultura de la imagen alberga una mirada de baja calidad en la que la velocidad del consumo parece proporcionalmente inverso a la captación del sentido. El experimento en los museos, aun con su componente paródico, ilustra bien la orientación presente del acto de mirar: un acto masivo, permanente, que atraviesa fronteras e intimidades, pero, simultáneamente, un acto superficial, amnésico, que apenas proporciona significado al que mira, si este niega las propiedades que exigiría una mirada profunda y que, de alguna manera, se identifican con los que requiere el acto de leer: complejidad, memoria, lentitud, libre elección desde la libertad. Frente a estas propiedades la mirada idolátrica es un vertiginoso consumo de imágenes que se devoran entre sí. Al adicto a esta mirada, al ciego mirón, le ocurre lo que al pseudolector: tampoco está en condiciones de confrontarse con las imágenes creadas a lo largo de milenios, desde una pintura renacentista a una secuencia de Orson Welles: las mira pero no las ve.

Hace escasas semanas  que habéis tenido la oportunidad de admirar las obras que se citan en el artículo. ¿Estáis de acuerdo en que la mirada del visitante en un museo ha perdido calidad y capacidad para entender y disfrutar de la obra de arte? ¿Se ha convertido la visita al museo en un acto consumista y no en un placer de primer orden, en una experiencia que debería cambiarnos, darnos otro punto de vista, ofrecernos una mirada única por ella misma? Intenta dar una opinión razonada de la crítica que hace el autor a las actividades culturales, al visitante de los museos, al turista, al que mira sin ver.

domingo, 29 de marzo de 2015

SER O NO SER: LA METAFÍSICA

No da a tiempo a todo en las horas de clase. El hecho de ver este vídeo tenía como objetivo haceros llegar algo tan abstracto como la metafísica de una manera más amena y directa. Así pues, os dejo el vídeo como entrada del blog y os animo a comentarlo. Se trata de un coloquio del programa Para todos la 2 en el que invitaron al catedrático de Metafísica en la UAM, Ángel Gabilondo, (exministro de Educación y actual candidato a la presidencia de la Comunidad de Madrid) a debatir sobre la cuestión con un interesante interlocutor, artista y filósofo, Jorge de los Santos. En esta entrada se trata de que déis una valoración general desde varios aspectos: ¿qué es la metafísica?, ¿qué nos enseña la metafísica?, ¿tiene algún interés para nuestra época? Y, por otro lado, ¿cómo se construye la filosofía a través del diálogo? Es decir: ¿cómo filosofan estos tres señores mediante la conversación, el intercambio de ideas, la contrastación de las mismas...? Espero que os resulte interesante. Tenéis de tiempo para intervenir hasta el día 12 de abril. 


jueves, 19 de marzo de 2015

LA DECISIÓN DE SOPHIE

Empezaremos con el cine. En esta película de 1982, basada en la novela homónima de William Styron, se relata el final de la vida de Sophie, una mujer judía que tuvo que enfrentarse al dilema más cruel: decidir quién de sus hijos ha de vivir. La decisión de Sophie no se da en una circunstancia normal, sino en una guerra y en un campo de exterminio. Sophie sobrevive al infierno, pero se lleva la culpa y el dolor para el resto de su vida, que no tendrá un final feliz.



Después de ver la escena (la puedes encontrar también doblada al castellano), intenta explicar: en qué consiste el dilema, cómo son las circunstancias que rodean la decisión de Sophie, cuáles crees que son las razones para su decisión, cuáles pueden ser los sentimientos de Sophie en el momento de decidir y posteriormente, y finalmente, intenta dar una valoración personal de este dilema. 

Incluyo un enlace a la ficha técnica: http://www.filmaffinity.com/es/film630803.html